Rechazado el recurso contra la ordenanza


El juez rechaza parar la ordenanza que regula las zonas peatonales
Rocío Velis

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía permitirá que las bicicletas sigan accediendo al Centro de la ciudad después de que haya rechazado la suspensión cautelar de la ordenanza de peatones y ciclistas que reclamaban ocho asociaciones de vecinos en un recurso contra la norma.

De momento, los usuarios de bicicletas en la ciudad podrán seguir accediendo a las calles del Centro por las zonas restringidas a los peatones, tal y como indica la ordenanza municipal de peatones y ciclistas, aprobada por el Ayuntamiento el 14 noviembre.

La norma municipal ha sido, por ahora, refrendada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), al desestimar éste las medidas cautelares reclamadas por ocho asociaciones de vecinos del Centro. Las entidades –Museo y entorno, El Arenal, Santa Cruz, Casco Histórico, Puerta Osario y entorno, Pumarejo-San Luis, Colectivo Alfalfa y Estación de Córdoba– reclamaban que el acceso compartido de los ciclistas y peatones fuera vetado de forma cautelar, hasta que los magistrados entraran a resolver el fondo del recurso presentado contra varios puntos de la citada ordenanza.

La Sección Tercera de la Sala de lo Contencioso del Alto Tribunal Andaluz, ha rechazado la medida en un auto que se apoya en el artículo 130 de la Ley Contenciosa-Administrativa que indica: “La medida cautelar podrá denegarse cuando de ésta pudiera seguirse perturbación grave de los intereses generales o de tercero que el Juez o Tribunal ponderará en forma circunstanciada”.

De esta forma, los magistrados entienden que, dada la “trascendencia de la ordenanza”, la suspensión significaría un perjuicio a los intereses generales. Además, la resolución judicial considera que en este caso la finalidad del recurso no se verá afectada por la no adopción de la medida cautelar, indicando que las mismas se adoptan cuando “la ejecución del acto o la aplicación de la disposición” sí hicieran peligrar dicha finalidad.

Asimismo, según explicó el presidente de la asociación Museo Entorno, Manuel Antonio Ruiz Berdejo, la negativa del TSJA responde también a “una falta de concreción de los puntos objeto de la impugnación”, es decir, más bien a cuestiones de forma que de fondo. No obstante, la decisión judicial aún no es firme.

Las entidades argumentaban las solicitud de medidas cautelares, entre otros puntos, con sentencias del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en las que se señala que bicis y peatones no pueden circular por la misma vía, ya que las bicicletas tienen consideración de vehículo. Una vez presentada la pieza separada de las medidas cautelares, el TSJA emplazó al Ayuntamiento para que aportara sus alegaciones a la reclamación, que finalmente han sido aceptadas.

En su recurso, los vecinos se oponían a un serie de puntos de la ordenanza porque entienden que “incumplen la normativa de Tráfico”. En este sentido, pretenden que la norma municipal recoja un mayor carácter sancionador para con las infracciones que puedan llevar a cabo los conductores de bicicletas, afectando a artículos y aspectos relacionados con la tasa de alcoholemia de los ciclistas, la inclusión de remolques y semirremolques en estos vehículos o la señalización de los itinerarios de las bicicletas.

El Correo



Es de sentido común, el juez ha hecho lo que tenía que hacer.
Ahora que se ha peatonalizado gran parte del centro, muchos ven a una bicicleta como si vieran a un coche que les va a atropellar.
A muchos vecinos se les ha venido encima tanta peatonalización y no entienden o no lo quieren entender que la bicicleta es un medio de transporte y puede circular por las zonas peatonales sin perjudicarles.

¿Qué piensan uds de este tema?

Seguiremos informando

2 comentario/s. Deja el tuyo:

Anónimo dijo...

Esperemos que al Ayuntamiento no le tiemble la mano y desbloquee la peatonalización del centro, a pesar de la resistencia de la minoría de siempre.

Anónimo dijo...

Veo bien que se multe a los ciclistas manifiestamente infractores. Es triste ver a ciertos "niñatos" circulando por el carril bici haciendo ostentación de su infantilismo, o infectando una aceleración impropia de gente ecológica y desintoxicada del ritmo de producción que nos imponen. Para ellos, bien están las multas.

Ahora bien, de igual manera debe sancionarse a todo aquél conductor interpone su cacharro contaminante en elcarril bici, anteponiendo su puntual circunstancia al común uso del carril bici público. Basta de dejación policial, exijamos la patrulla ciclista de la policía local, sólo así, algunos, a falta de respeto, girarán su egocéntrica sesera al sentir en su dentadura el tiro del bocado del munícipe.