Una de incívicos

Ya que los periódicos sevillanos están de vez en cuando sacando al peligroso ciclista que va por una zona peatonal, ¿por qué no sacar a los incívicos conductores que hay en la ciudad?


Podríamos empezar por este conductor que ha decidido aparcar su coche en una zona ideal para ello, impidiendo a los peatones su paso y obligándoles a tener que invadir el carril bici.


Este caso ya lo he comentado antes en otro post anterior. Junto a la recien estrenada y peatonalizada Plaza del Salvador deciden aparcar los coches en la calle Villegas un día si y el siguiente también.

En las dos imágenes se observa el espacio que el camión ha dejado a los peatones para que puedan pasear por un acerado que tienen todo el derecho y que les ha sido robado por un vehículo contaminante de gran tamaño.


Lo curioso es que al mirar el camión detenidamente encuentro este cartel pegado en una de las puertas del mismo.


Justo detrás decidió otro incívico ciudadano seguir el ejemplo del anterior y aparcar su vehículo contaminante en una zona destinada para el tránsito de peatones.

Dejo lo mejor para el final, ¿quieren saber cual era la tarea que el conductor del camión estaba desempeñando y era tan urgente que tenía que aparcar su camión en pleno acerado y privar a los peatones de su espacio?



Comprar tabaco en un estanco que hay en la calle Villegas. El conductor incívico del camión es el señor de la derecha, con el mono verde que tiene detrás las letras de Sando Construcciones.

Todo esto pasa día a día en el centro de Sevilla y los periódicos sevillanos se dedican a lo primordial, denunciar a aquellos ciclistas que yendo por zonas peatonales transitamos junto a ellos mientras estos vehículos invaden zonas peatonales quitándoles espacio a los propios peatones, pero eso no se denuncia, pues es algo normal a lo que tristemente estamos acostumbrados.

2 comentario/s. Deja el tuyo:

Anónimo dijo...

Lo dicho, si se quiere de verdad que los coches no pongan sus ruedas en donde les venga en gana, lo verdadermante efectivo es poner bolardos o cualquier otra barrera física. Lo demás, balas de fogueo.

Carriles Bici Sevilla dijo...

Coincido totalmente contigo, y creo que también coincidirán los vecinos de la Plaza de Molviedro que al no disponer de bolardos los coches aparcan en las zonas peatonales un día si y otro también.